Para Empezar...

Empezare por compartir una historia corta, sencilla, verídica, importante y trascendental para mi, que habla de lo que soy, de lo que viví, y de lo que me hizo transformarme a lo largo de toda mi corta vida, hasta convertirme en el presente, y que me seguirá cambiando hasta convertirme en mi futuro… la verdad de las cosas es que existe una fuerza, algo, no se que sea, que empuja desde lo mas profundo de mi ser, ideas, sensaciones, sentimientos y no se que chuchada mas, a salir. Desde muy chico, empecé a interesarme por la poesía, como un método de escape... una manera extraordinaria de que mi mente viaje por el lugar QUE ME DE LA GANA y cuando a mi ME DE LA GANA, la manera perfecta de salir de las cuatro paredes en las que te encuentras, de romper los barrotes que te aprisionan, y en fin, de ser libre...

Sin embargo ahí no quedo la cosa... pasaron unos años mas... y ese ambiente... esa dimensión en la que me refugiaba frente a cualquier acontecimiento, resultaba cada vez mas pequeño, y cada vez mas débil para contener todo el caudal de ideas que guardaba dentro, y que cada vez crecía mas... y en ese momento, cuando me desesperaba por ir aun mas allá...husmeando entre las cosas viejas que se guardan en las azoteas, bodegas, almacenes, depósitos, que todo el mundo tiene en sus casas... la encontré... de un color caoba, rojizo por los años, vi su silueta..vi sus colores, y bueno, las casualidades no existen todos lo sabemos... me enamoré... no fue a primera vista... ya que estaba cubierta... sin embargo apenas la descubrí lo sentí... esa conexión... esa convicción, de que una vez mas, la vida me daba la oportunidad de expandirme... era ella.. Yolhanda... mi guitarra.